Hay mucha bondad para nosotros, los humanos, en las hojas verde plateadas de la salvia. El intenso aroma aporta a nuestros platos un toque especiado. Sus aceites esenciales son extremadamente curativos: un té de salvia alivia el dolor de garganta de forma suave y natural, pero lamentablemente sólo se puede cosechar fresco en el jardín en verano. Pero gracias al secado cuidadoso, la salvia está disponible durante todo el año.
Conservar la salvia
La salvia prospera en los jardines de nuestra casa. Con el paso de los años, puede convertirse en un atractivo arbusto del que brotan muchas hojas verdes en verano. La salvia recién cosechada y luego procesada inmediatamente tiene mejor sabor y contiene muchos aceites esenciales. Pero después de la floración, la cantidad de aceites esenciales disminuye y la cosecha termina con las primeras heladas. Para que la salvia no desaparezca de nuestra dieta durante meses, puedes aprovechar fácilmente la abundancia de hojas para crear un suministro seco para el invierno. Sus efectos beneficiosos en forma de té son especialmente necesarios cuando le duele la garganta y necesita alivio. La salvia se puede congelar para conservarla, pero secarla es más beneficioso. Esto significa que la salvia conserva su sabor por más tiempo que si estuviera congelada. Hay varias opciones para el secado:
- en el aire
- en el horno
- en el microondas
- en el deshidratador
Cosecha salvia fresca
Los aceites esenciales son los que hacen que la salvia sea especial. Aportan el sabor deseado en los alimentos y tienen un efecto curativo en la medicina natural. Por tanto, es importante conservar la mayor cantidad posible en las hojas secas. Para que esto tenga éxito, las hojas recién cortadas deben contener tantos aceites esenciales como sea posible. En este caso es especialmente importante el momento de cosecha correcto, ya que su concentración no es siempre alta.
- Utiliza hojas con muchos aceites esenciales
- El contenido de aroma en las hojas varía
- alcanza su punto máximo unos días antes de la floración
- por lo tanto, el momento ideal de cosecha es desde principios de verano hasta mediados de verano
- Recogiendo hojas frente al sol del mediodía
- usa tijeras de podar afiladas o un cuchillo limpio
- Corta las puntas de los brotes o ramas enteras rectas
- Las flores no son aptas para su uso
Consejo:
Bañe suavemente el arbusto con agua la noche antes de la cosecha. Las hojas quedan limpias y todavía tienen tiempo de eliminar la humedad antes de la cosecha.
Limpiar bien la salvia
Si la salvia se limpia con agua inmediatamente antes de seguir procesando, tendrá más dificultades para secarse. Sin embargo, a veces no hay forma de evitarlo. Especialmente cuando se cultiva al aire libre, cuando se recoge salvia silvestre o cuando los animales pueden haber entrado en contacto con ella, es necesario lavarla.
- siempre que sea posible, enjuague la noche antes de la cosecha
- de lo contrario lavar antes de secar
- Enjuague las hojas brevemente
- use agua fría o tibia
- Seque las hojas con cuidado con papel de cocina
- Selecciona las hojas con manchas y partes marchitas
Nota:
La salvia recién cosechada y limpia debe procesarse o secarse lo más rápido posible. El almacenamiento prolongado tiene un efecto negativo en el sabor posterior.
Preservando la salvia en el aire
Las ramas de salvia que cuelgan en el aire pierden gradualmente su humedad hasta que finalmente están completamente secas. Este es un método sencillo para conservar la salvia que no requiere más que salvia y un poco de paciencia. Sin embargo, como este tipo de secado lleva algún tiempo, la salvia pierde algunos de sus aceites esenciales.
- Atar los brotes con hilo
- para hacer ramos de 6 a 10 ramas cada uno
- colgar boca abajo
- una habitación oscura y seca es ideal
- alternativamente: colocar hojas individuales sobre periódico
- El secado tarda aproximadamente de 1 a 2 semanas
- El tiempo de secado depende del clima
- luego guarda la salvia en un recipiente
Consejo:
La habitación en la que se colgó la salvia para secar debe ventilarse regularmente. Esto permite que la humedad escape y que la salvia se seque de forma segura sin enmohecerse.
Quitar la humedad del horno
La salvia se puede transformar en una hierba almacenable en el horno más rápidamente que en el aire. Todo el proceso se completa en un día y la salvia se seca por completo. Esto conserva más sustancias aromáticas que cuando se seca al aire.
- Cosecha la salvia fresca. Cuanto más frescas están las hojas, más aceites esenciales contienen.
- Limpia la salvia con agua tibia si es necesario.
- Luego, seca cuidadosamente las hojas con una toalla de papel de cocina.
- Calienta el horno a una temperatura de 40 a 50 grados.
- Forra una bandeja para hornear con papel de horno.
- Extiende las hojas de salvia sobre el papel de horno sin dejar que las hojas individuales se toquen entre sí.
- La bandeja para hornear ahora puede meterse en el horno.
- Deje la puerta del horno ligeramente abierta para permitir que escape la humedad.
- Las hojas se deben voltear a mano aproximadamente cada 30 minutos.
- Después de aproximadamente 6 a 8 horas, las hojas estarán completamente secas.
- Frota algunas hojas entre tus dedos. Si crujen y se desmoronan, la salvia está muy seca.
- Deja que la salvia se enfríe por completo.
- 1Coloque la salvia enfriada en un recipiente con tapa de rosca adecuado.
Consejo:
Tenga paciencia hasta que el momento óptimo de cosecha sea justo antes de la floración, cuando el contenido de aceite esencial es mayor. Serás recompensado con un aroma más intenso y un mayor poder curativo.
Secado rápido en el microondas
Si tienes prisa y tienes microondas, también puedes conservar la salvia de esta forma. Es uno de los pocos tipos de hierbas que se pueden secar en el microondas. El proceso es similar al del horno, excepto que todo sucede a un ritmo rápido, típico de los microondas. Sin embargo, la velocidad también tiene una desventaja: el tratamiento intensivo conduce a una pérdida de sustancias aromáticas. Por lo tanto, la salvia secada en el microondas es ideal para arreglos secos o como material para fumar.
- Prepare la salvia recién cosechada para secarla enjuagándola con agua tibia y luego séquela dando golpecitos con un paño de cocina.
- Corta un trozo de papel de horno apto para microondas y fórralo con él.
- Extiende las hojas de salvia encima sin tocar las hojas individuales. Alternativamente, puedes colocar las hojas en un recipiente apto para microondas.
- Configure su microondas de 150 a 200 vatios y enciéndalo durante unos 10 a 20 segundos.
- Luego abre la puerta del microondas para permitir que escape la humedad.
- Comprueba hasta qué punto se ha secado la salvia.
- Si la salvia todavía está húmeda, voltea las hojas y comienza otra pasada de 10 segundos.
- Repetir el proceso de secado hasta que la salvia esté completamente seca.
Consejo:
Espera a que la salvia se enfríe antes de ponerla en un vaso oscuro. Si la salvia aún está caliente, se puede formar condensación y afectar su vida útil.
Conservar la salvia en el deshidratador
Si tienes un deshidratador, podrás conservar la salvia de forma especialmente fácil y cómoda. También puede valer la pena comprar un deshidratador nuevo, especialmente si el jardín produce una gran cosecha de verduras, frutas y hierbas. Un deshidratador automático es adecuado para conservar muchos productos de jardinería. Este método funciona como un horno: el aire caliente fluye alrededor de varias bandejas de tamiz. Sin embargo, un deshidratador automático ahorra especialmente energía en comparación con un horno. Esto también significa que el horno no estará bloqueado durante muchas horas.
- Recoge la salvia fresca y antes de que el sol del mediodía brille sobre el arbusto.
- Limpia las hojas con agua corriente para enjuagar cualquier impureza.
- La salvia húmeda tarda más en secarse, así que sécala con palmaditas suaves antes de colocarla en el deshidratador.
- Distribuya las hojas de salvia sobre el fondo del colador, dejando aproximadamente el 20% del área libre.
- Eliminar pantallas innecesarias. No debe haber otras partes de la planta en el deshidratador durante el proceso de secado.
- Enciende el deshidratador al grado recomendado en las instrucciones de uso.
- El proceso de secado debe finalizar después de aproximadamente 6 a 7 horas. Las hojas aún deben estar ligeramente verdes y flexibles.
Guarda la salvia seca correctamente
Para que la salvia conserve su aroma durante mucho tiempo y, por lo tanto, le resulte útil, conviene conservarla adecuadamente después del secado. Una salvia almacenada de forma óptima conserva durante mucho tiempo sus aceites esenciales y, por tanto, su sabor y sus efectos curativos.
- La salvia debe estar completamente seca
- Almacenar adecuadamente inmediatamente después de completar el secado
- use un recipiente de almacenamiento adecuado
- el vidrio hermético es ideal
- almacenar en un lugar fresco y seco
- El contenedor está etiquetado con nombre y fecha
- La vida útil depende de las condiciones de almacenamiento
- si se almacena adecuadamente, durará aproximadamente 2 años
Nota:
Si la salvia se almacena cuando no está completamente seca, se puede formar moho. Por lo tanto, antes del almacenamiento se debe realizar una prueba de sequedad. Si las hojas crujen y se desmoronan al tocarlas, la salvia está seca.
Información importante
Además de muchas sustancias beneficiosas, la salvia también contiene tuyona tóxica. Por lo tanto, los medicamentos a base de salvia no son adecuados para un uso prolongado. Esto también se aplica al té de salvia. En la cocina, sin embargo, la salvia se puede utilizar de forma segura para condimentar platos porque la dosis utilizada es pequeña.