Si desea crear un tanque séptico usted mismo, debe prestar atención a varios factores. Unas instrucciones de construcción completas por sí solas no son suficientes. También se deben tener en cuenta los permisos del pozo y el tamaño adecuado de la excavación. Para ahorrar costes y encontrar una solución funcional para el agua de lluvia y las aguas residuales, es necesario realizar una planificación adecuada con antelación.
Función
La función de las fosas sépticas es tradicionalmente la de eliminar aguas residuales y excrementos. Por ejemplo, debajo de los inodoros se pueden encontrar fosas de remojo. Aquí, la orina y otros líquidos pueden filtrarse al suelo, mientras que las sustancias sólidas quedan retenidas y se pudren en el pozo. Esto tiene sentido, por ejemplo, si la conexión al sistema de alcantarillado no es posible o implica un gasto económico muy elevado.
Sin embargo, este tipo de uso en Alemania sólo está permitido en muy raras ocasiones. En la actualidad se suelen utilizar fosas de recogida. No se filtra nada en ellos, ya que las paredes y el suelo son impermeables a los líquidos. Si el pozo de recolección está lleno, se debe bombear. En términos de tratamiento de aguas residuales y protección del medio ambiente, esto tiene mucho más sentido que permitir que las aguas residuales y los excrementos se filtren en el suelo. Sin embargo, esto implica un esfuerzo adicional y costes de seguimiento, por lo que hay que considerar si una conexión al sistema de alcantarillado no sería una opción más ventajosa desde el punto de vista financiero a largo plazo y requeriría menos esfuerzo.
Aprobación
En Alemania sólo se permiten fosas de filtración para recoger y evacuar el agua de lluvia. Sólo en muy pocos casos excepcionales se utilizan para letrinas y similares y están autorizados en consecuencia. Los pozos de filtración de agua de lluvia generalmente solo se usan y aprueban como soluciones temporales.
Cumplen funciones bastante útiles. Esto incluye, entre otras cosas, el drenaje y la filtración específicos de agua que, de otro modo, se acumularía en zonas selladas y urbanizadas o se filtraría en lugares indeseables. También alivian la tensión en el sistema de alcantarillado y devuelven las precipitaciones, como la lluvia o la nieve derretida, directamente al agua subterránea.
En cualquier caso, se requiere un permiso para crear uno o más tanques sépticos en una propiedad. Esta aprobación se puede solicitar en la oficina ambiental estatal correspondiente. La solicitud debe realizarse antes de que el plan de construcción tome forma. Esto ahorra tiempo y esfuerzo y evita que la planificación sea innecesaria o se realice incorrectamente si solo se permite un determinado tipo de fosa séptica.
¿Infiltración o pozo de recolección?
Las precipitaciones, como la lluvia, la nieve derretida o el granizo, se pueden dirigir a un pozo para que se filtren, pero también se pueden aprovechar. Por ejemplo, para regar selectivamente el jardín o para regar en general o como agua para descargar el inodoro. Incluso con este uso, el sistema de alcantarillado se contamina de forma más o menos uniforme, el agua también se utiliza para un buen fin y, a largo plazo, incluso se puede ahorrar dinero. Es importante que el agua se canalice hacia un pozo colector y, por lo tanto, no pueda filtrarse.
Esta consideración también debe tenerse en cuenta al planificar.
Instrucciones de construcción – paso a paso
Una vez aprobada la construcción de un pozo, todo puede suceder con bastante rapidez. Porque las instrucciones de construcción y la implementación no son difíciles. De hecho, sólo se requieren unos pocos pasos para crear el hoyo e incluso poder acceder al área encima de él.
El procedimiento es el siguiente:
1. Se cava un hoyo en el lugar deseado. Este debe colocarse de manera que el agua pueda filtrarse fácilmente. Por tanto, el suelo debe ser muy absorbente. La excavación se puede realizar generosamente para que el agua tenga suficiente espacio para filtrarse lentamente, incluso en épocas de lluvia. El tamaño de la tapa del pozo sirve como guía, que luego debe encajar en el pozo y descansar sobre el borde y la grava.
2. El fondo del pozo se llena con grava hasta una altura de unos 20 centímetros. Esta capa es importante para mantener la tierra absorbente y sirve como base del pozo.
3. En el borde del foso se inserta una conexión para el tubo de lluvia. Esto permite introducir el agua de forma específica.
4. En el cuarto paso se inserta o se coloca la tapa del foso. La tapa debe apoyarse sobre la grava y quedar lo más recta posible. Esto logra una distribución más uniforme de la presión sobre la tapa. También es importante que la conexión o tubería por la que fluya el agua de lluvia encaje y selle bien. De esta manera el agua puede entrar lentamente y filtrarse o recogerse. La tapa forma el hoyo y evita que se obstruya con tierra, hojas u otras sustancias.
5. Una vez colocada la tapa, se puede cubrir adicionalmente con papel de aluminio. Esto no es necesario, pero ofrece seguridad adicional y puede prolongar la vida útil de la tapa, ahorrando así costes y reduciendo esfuerzos futuros.
6. Finalmente, la tierra excavada se amontona sobre la tapa y se apisona con cuidado. Para que la zona situada encima del foso no sólo sea accesible sino también accesible, se deben tomar aquí precauciones especiales.
El último paso es la conexión al sistema de tuberías, que drena el agua y así la dirige al pozo.
Consejo:
Por lo general, vale la pena usar una miniexcavadora para cavar el pozo. Esto también se aplica si en lugar de una fosa séptica se construye un pozo de filtración, ya que el diámetro y la profundidad generalmente deben ser superiores a un metro.
¿Qué está permitido y qué está prohibido?
Esta pregunta sólo puede responderse en términos generales de forma limitada, ya que se deben tener en cuenta varios factores. Si desea construir una fosa séptica, primero debe ponerse en contacto con la oficina responsable para obtener información y, si es necesario, recibir asesoramiento. En general, está prohibido crear fosas de recogida o de filtración sin autorización, así como fosas para la depuración o infiltración de aguas residuales, como por ejemplo fosas debajo de los retretes. En este caso se pueden utilizar lavabos sin desagüe, que en caso necesario se pueden vaciar y eliminar las sustancias que contienen.
Esto se aplica a los terrenos que se consideran propiedad, así como a las parcelas arrendadas y otras áreas alquiladas. Quien no cumpla las prohibiciones o permita que las aguas residuales y los excrementos se filtren o los trate sin autorización se enfrentará a severas multas. Si las aguas residuales se eliminan ilegalmente o se filtran, se pueden adeudar varios miles de euros.